martes, mayo 1


Nos miramos mientras tomábamos agua
abajo del agua
gamos y monos pasaban
por la ventana

Algo de felino y de araña
y de llanura y helada
y de embriaguez de palabras
de corazón de mente

Algo de galope
y de cenizas de horizonte
y de volcán latente
inminente
sonreían tus pestañas

lunes, septiembre 18

Llovía

Tengo un jardín, nunca lo regué, pero estaba ahí.
Tiene flores, arbustos y árboles, de todos los colores, olores, sabores.
Tiene también recovecos, espacios recónditos, huecos.

Una vez encontré rosas rosas, o algo así, era rosa; nunca me aprendí los nombres
                                                                                                                       de las flores.
Olían rico y perfumaban todo alrededor, adormecían como un leve canto, casi se las oía susurrando.

Amaba, o algo así -un sentimiento fuerte, casi físico-, esa esquina, de mi jardín.
Un día lo pisé, todo, cada pétalo, cada hoja, y me quedé mirándolo hasta que se secó, íntegro. Entonces fumé, tiré la colilla, prendida, encendida. Ardió todo, lo prendí, al fuego. Y quemó, el fuego.

Tiene más lugares mi jardín, a veces los miro, pero nunca los vi. Hay otras flores, colores, olores, canciones. Todos los días, camino, por ahí.
No siempre quemo cosas.
A veces sí.
Lo que sí, no riego, nada. 
Soy la brisa que transita, que mueve las ramas y a veces, se lleva consigo, algunas hojas.

Me gusta la lluvia
cuando cae 
de abajo
             hacia arriba.

martes, agosto 8

Las espinas sin voz

Todos los clavos, apretalos, tomá mi mano.
El veneno es el antídoto, tomateló, hasta la última gota, hasta que caminés sobre botellas rotas.
Una mano, punto, final. Nada más. Nada menos. No te ahogues.
Decidimos... nominar. Huracán.
Todos los clavos, apretalos.
Ese fútil intento de métrica correcta, de decoro moral, de deber ser normal, me lo tomé, me emborraché, y lo vomité, a tus pies. Lo estoy limpiando, con un trapo empapado con desifectante, y perfumito.
Los clavos, todos. Los clavos. En los pies, en las manos.
A veces me despertabas, a la noche, te sorprendía dándome pinceladas, en la cara, yo te escupía sonrisas y los dos nos tapábamos, con la sábana.
Apretalos. Apretalos, los clavos. No me duele y quiero sangrar, por algún lado, pero para afuera, apretalos.
Retrato de pasado; en tu espejo mi cará reflejaba la carencia, anhelada, de retazos cosidos de telas viejas, que guardabas, en el fondo del placard.
Los clavos, martillalos, destrozame entero, y enterrame, por ahí, en el suelo, algún suelo.
Huracán.
Retrato de futuro; una vez me dormí, y me desperté ese hoy con olor a ese mañana. Me bañé, me lavé bien y salí a a correr, y volví, sin querer, a darte un abrazo.
Salió el sol, qué lindo eso, el sol. Alumbra, el sol. Da calor, el sol. No
Los clavos.
Algún suelo.
Todos los cielos se ven, mirando, para arriba. Cada día, por separdo, como cada martillazo, clavando.


Los clavos.

viernes, julio 28

se me cayeron por ahí, las ganas de vivir
me olvido de buscarlas, y si me acuerdo, no tengo ganas
deben estar en algún rincón, por ahí,
rincones del espacio, o del tiempo, o de la última vez que te sonreí

se me cayeron, las perdí

lunes, julio 24

tengo atravesada
una espada en la garganta
tiene la forma
de dos palabras

no sé qué hacer
para sacarla

se me rompieron todas
las otras palabras
no sé cómo se arman

no sé decir las cosas
sin que sean dichas
cosas, las mil otras

tengo una espada
atravesada
en la garganta
tiene esa forma
de dos palabras

martes, julio 11

(Las) cosas (que) extraño

Tu(s)
ojos de almohada
calor de sábana
sonrisa de persiana mal cerrada.

Las
notas 
de
tus
 palabras.

Tus
labios lupulares
miradas lunares
horitañas montazontes

Les
animales
mortales
inside.

Tu
tacto ígneo
moverte de cangrejo
embotamiento azul en el cielo




Los
sonidos
 de tus pasos
caminando.

Nuestra
carcajada sísmica
conexión elecrizante
llama en el fuego

Nuestro aire
nuestra lluvía

aquel


Huracán.




Lo extraño

Mi

esencia la inesencia

ausencia la decencia

ciencia la demencia

Me late
un tambor en la espalda negra
la espalda baja

las faquíricas flautas

Lazos
deshace
el desenlace.
El ojo
viperino
bebió
vino.
Aletea
aletea
aletea.

Cosas

granizan granos grises

trazan trazos tristes

crepitan crean crisis

frondoso frío fresco

tragan tragos tropas

brisas braman bríos

risas raman ríos

predican predios presos

dramático drama dromedario


miércoles, julio 8

Pronombre personal de segunda persona, singular.


Algo que no tenía forma
buscaba
debajo de
los sueños
bajo las
rocas

Algo que no tenía nombre
indecía
a cada
segundominuthóra
a gritos, gritos de
roca

Cuando no pensé
cuando pensé que no
cuando no pensé que cuando pensé que no pensé pensé que pensé:
Alas
encontré
y escamas, filosas
encontré un volcán de cenizas rojas
colmillos sedientos
y sonrisas, hermosas...
espinas y brotes
de rosas
ojos lunares
y tenías nombre

y tenías forma.

domingo, marzo 1

Nudos gordianos

Lo que principia no termina
nace lo que muere
termina cuando no
empieza

Lo que no funciona, la pena
vale construir
porque no es para
es

Así la música
su silencio
palabras así
se desarman

Así las cosas
desvanecen
se
inhalan
se
exhalan
se

respiran

lunes, noviembre 24

Nombrar es mentir

Mil cosas, diezmil cosas, cienmil cosas, pero ninguna.
Podría...
Podría...
Pero ninguna.
Porque el vacío, el silencio, el viento.
Silencios vacíos en el viento, que talvez con mil cosas, diezmil, cienmil...
Pero ninguna.
Silencio.
Porque silencio.
Porque sí, quiero, que caminemos, fuera del tiempo, sin nombrar el cielo ni el suelo.
No crear.
Tampoco creer.
Transformar. Dar otras formas a las formas, pero sin nombrarlas.
Deformarlas.
Despojarlas.
Amorfia.

¿Querés... salir... a caminar?

miércoles, octubre 1

Hay

Ese momento que pienso
no va a venir,
                                                     otra vez.
                            viene.

La neurosis
los valoresyposturasydisquerazones
manía por la presa
cobardía de cazador
que distanciaobjeto,
un desamor del trofeo.
                                          unmiedoaléxito

Posibilidades posibles.
Ajedrez inédito.
Hay piezas y hay tablero
                                     loquenohayesmovimiento.

No hay viento

Lo que hay, es silencio.

Y el silencio, 
suenaresuena
                                               hay eco. untemblordeloscimientos.

martes, agosto 19

Escupimos desprecio,
Asumimos el precio.
Nos revolcamos
en la mugre, en la mierda
no molesta.

Son otras, las cosas, que molestan.

Caminamos sin caminos,
no suspiramos sueños ni
soñamos suspiros.
No esperamos
respiramos.

Son otros, nuestros deseos.

No la noche y sus fantasmas,
no los demonios,
ni las tormentas, ni los truenos.
Pero los espejos…

Son otros, nuestros miedos,
pero sí, tememos.







jueves, abril 3

Los elementos

A veces, me levanto
de mal humor, maldigo
en silencio hiervo
puteo tiempo, espacio y materia y no recuerdo
que me olvidé de
desayunar. Y hiervo
la pava, me hago un té
negro
y unas tostadas.

A veces siento ganas
de matar, asesinar, suicidar.
Afilo los cuchillos
con la lengua.
Clavo alfileres
con los ojos.
Aprieto los nudos de la soga
con las orejas y
corro la cortina, abro
la ventana, para colgarla
y entra el aire de la mañana
trasnochada,
respiro
cocino
miro el cielo
cuelgo la ropa
respiro.

A veces, me detesto
impotencia de lágrimas no derramadas
alaridos de silencio
espasmos, convulsiones,
inmóviles.
Y abro la puerta cerrada
camino a la luz
del sol, me cargo,
me caliento
soy fuego.
Camino, voy a visitar a algún amigo.

martes, febrero 11

Los ojos nublados
humos cruzados,
cenizas de hielo
de otro infierno.

No escucho tu silencio,
no circula el viento.
Vacío en el espacio del tiempo.
Si tan sólo, tu aliento...

Tu piel es aire colorido
y mis manos pinceles acromáticos
y las nubes, te difuminan.
Ahora oigo mis dientes, rechinan.

lunes, febrero 3

Si por cada vez
que no,
coleccionase una piedra
nada
tendría una cantera.

martes, enero 21

Chivos expiatorios

.Ya no te aguanto, sos muy pesado.
-Soy osmio.
.Sos inestable.
-Soy derrumbe.
.Sos indeciso.
-Soy de aire.

.Nunca actuás, me cansé de esperarte.
-Soy lo último que se pierde.
.Estás perdido.
-Soy camino.
.¿Sabés que nos vamos a morir?
-¿Sabés que podés sonreír?

.Dejá de mirarme.
-Sacate los ojos.
.Podés acercarte.
-Puedo ser lluvia y no mojarte.
.Podés caminar hacia adelante.
-Soy agua en un estanque.

.Podemos agarrarnos de la mano.
-Soy humo gris de tabaco.
.Esfumate.
-Soy las piedras que pisaste.
.Podés tirarte al río.
-Río, de vino río.
                     

domingo, enero 12

Nada, eso.

Hay un sujeto extraño, que transita silencioso por las calles del pueblo. Visita gente, de manera poco ortodoxa, casi hasta desconcertante. Llega a la casa determinada, golpea la puerta, le abren, le hablan, no contesta, no pasa, no se mueve, no nada. A veces le cierran la puerta en la cara, entonces se va. A veces dejan la puerta abierta, lo miran un rato, monologan, entonces se queda, y mira. A veces se sienta, en el umbral de la puerta. Después se va, y si el visitado fue cordial, vuelve, y así.
Una vez lo vi sonreir ante unos ojos de escorpión, que lo miraban del otro lado de la puerta que desde la primera visita quedó siempre entornada. De allí no se fue, allí se quedó, rodeando la casa, mirando por la ventana. Nunca le habló, nunca intento entrar, no nada. Él da vueltas alrededor de la casa. Él mira por la ventana.

sábado, enero 11

Palabras, pronunciadas, sin sentido. No se escuchan, y aunque sí, ¿qué?
¿Qué es comprender? Entender una mirada, co(n)-fundirse, podría decirse que eso. Y eso no es hablar con palabras. Las palabras pronunciadas limitan los mundos, los universos posibles.
No me hablés. No hablemos más. Caminemos conversando con nuestros pasos, como ayer, al sol, volviendo del lago, ¿notaste que nuestras sombras parecían agarrarse de la mano?
La armonía perfecta, si la hay, si puede aseverarse que existe algo susceptible de ser llamado perfecto tal y como usamos actualmente el término, eso es el silencio. El silencio es el no-ser o, dicho de otra manera, El Ser, con mayúsculas, un verbo supremo. Por lo tanto, ejercer la práctica del silencio es una acción suprema. No hablo del silencio absoluto, del vacío insondable, hablo de otro silencio, hablo de la paz, de la calma. ¿Notaste mi mirada buscando atravesar tus silencios?
La lluvia también es silencio, porque es paz, es armonía milagrosa, la vida misma viviendo. En otros tiempos alabé a la lluvia como canto, ahora me doy cuenta de que en realidad es silencio. El sonido de la lluvia es entonces uno de los sonidos del silencio, sí, el silencio suena, y no pienso que sea una afirmación contradictoria. Como hoy, abajo de la lluvia de verano, ¿no tuviste la impresión de que podíamos desaparecer si nos hubiésemos mirado a la ojos un minuto entero? Hubiésemos sido silencio, silencio en el silencio.


lunes, diciembre 2

Ciego

Esos ojos errantes
                                   erraron
                                                       el camino.
                                                                                 Los pasos resonantes,                                                                                                        
eterna música                                                                                                                                                     
                                                          del                                                 
                                                                                                                        laberinto.

                                                       Perdido.


  Ariadna

                                                                                        silenció
                                                                                                                  la música, cortó

                                los hilos.


miércoles, octubre 9

Adjetivación

Precisa incisión
negro sobre blanco
palabra manifiesta
proyección concreta.
                                             La muerte
                                                                       el absoluto entierro
                            de la vida

                                                     jamás vivida.

martes, agosto 27

Círculos

El vino se acaba, se apaga
la brasa perenne.

Como sangre de venas abiertas
la tinta se derrama, se seca.

En el silencio la música
por el silencio. 

Los ojos se cierran, duermen
las vidas que nacen. 

Y el sol.
Y el tiempo.

jueves, agosto 8

Un día me dijiste: ‘me llama el vacío’, mientras mirabas el lago desde el precipicio, yo miraba el reflejo de tus ojos en el agua, y te vi



-A veces me llama el vacío -dijo-, y pensé que me iba a mirar a los ojos y que me iba a abrazar después, pero su vista descendía por el acantilado como una gota de agua resbalando. Me senté al lado, y sentados miramos hacía abajo, vacío.
-Saltar y perderme -decías- y te asomabas al borde.
Y así los días, y así morimos.
Un día llovió y fuimos una gota juntos.
Un día vacío.

lunes, mayo 20

Nolugar

Nunca pude mostrarte, no alcanzó ese tiempo queno llegó a ser.


Sobre unas piedras el tronco
como si fuese un banquito de plaza
entre dos ríos,
entre dos ruidos
y la carrera montruosa
lucesgritosmotores
desafiando al tiempo
ladridosgruñidosrugidos
hacia el tiempo
y  un fluir infinito.


Bajo la sombra de ciclópeos monolitos
paredesgritosritos
hogar de las aves que no vuelan,
lamento de alas al viento
una ínfima isla.


Allí la paz
caosningunorden
paz de hojas de otoño
ningún cosmos, la paz 
movimiento inmóvil.


Lápiz
escritura
la paz
ilegida.










sábado, mayo 4

Horizontes de la sospecha

Hay alguien que habla cuando hablás.
Hay alguien que sueña cuando soñás.
Hay una sombra que persigue tus ojos, hay una ilusión de ver al mirar.
Hay alguien que dice que dice, hay una ilusión de comprender al escuchar.
Hay una persecución sin perseguido ni persecutor.
Hay una ilusión de estar corriendo y avanzar
Cuando hay, un sentarse, y nada, un nadarse que ahoga.
Hay un sol, un atardecer, un amanecer, y un sol.

Hay una base, un fondo de la pirámide, que tiembla, que bulle, se sacude.
Hay una ilusión de sismo, cuando todo es lo mismo.
Hay un ojo que mira, en lo alto, mira luminoso, encandila.
Hay un rumor sordo, una fuerza sin forma, una sombra de sombra entre los escombros de lo construido.

Hay una pregunta.
¿Qué?
Hay un eco, un tejido de infinitos sonidos ficticios,
y hay una palabra,
tras la palabra un nombre,
y un silencio detrás.
Hay un eco, un hilo musical que nunca cantó ni deja de cantar,
y una embriaguez, que no aprende a bailar.

domingo, abril 14

Deconstrucción

Acariciar, cada parte con cada parte.
Conocer lo desconocido con lo conocido, conociéndolo sin fin, su sin fin.
Y en los lunares, en los charcos agónicos de las sequías, en lo ínfimo, en los sutiles contrastes, susurrar un hálito de luz, conjurar las sombras, las sombrías formas.
Respirar la multiplicidad de fragancias proyectadas hacia infinitos infiernos, hacia infinitos paraísos, siendo una, una multiplicidad, única, unívoca.

viernes, abril 12

Titiriteros

Torres negras, que son faros, erigiéndose hasta los cielos aprópianse de la luz del sol, y son, simplemente, indestructibles. Alábanse cual dioses, y lo son: vertiendo su putredumbre en los arroyos donde abrevan los hombres sin sombra, rellenan el vacío de lo divino.
Y se ríen, a carcajadas, acariciándose las barbas, las barrigas, las tetas caídas; sonoros truenos en una tormenta que ahoga y no riega, se pudre toda siembra, se corrompen las lagunas, escasas fuentes de agua pura. Y acá abajo, los perros están tristes, y aúllan.